Cromatación amarilla - cincado amarillo
El zincado amarillo, como se conoce coloquialmente, no existe como proceso independiente. En su lugar, primero se aplica al metal un revestimiento de zinc puro, que tiene un color blanco plateado y protege el metal de la corrosión. A continuación se procede al cromatado, que confiere a la superficie su característico color entre amarillento y dorado. Este cromatado no sólo sirve para mejorar la protección contra la corrosión, sino que también confiere al componente un aspecto decorativo.
El color amarillento se crea mediante un postratamiento químico del revestimiento de zinc, conocido como cromatización o cromatización amarilla. Este proceso se utiliza a menudo en galvanotecnia para mejorar el aspecto de los componentes y aumentar su protección contra la corrosión. Los ámbitos de aplicación típicos de las superficies galvanizadas en amarillo son la industria del automóvil, la construcción y la ingeniería eléctrica.
En el pasado, sin embargo, estos revestimientos se basaban en el cromo VI, que era perjudicial para el medio ambiente y muy tóxico para el ser humano. El cromo VI podía filtrarse del revestimiento con el tiempo, lo que provocaba graves riesgos para la salud. Por este motivo, estos revestimientos están prohibidos.
En los últimos años, se ha investigado intensamente para desarrollar un revestimiento iridiscente amarillo sin cromo VI. Ahora existen soluciones basadas en el cromo III que pueden producir un recubrimiento amarillento similar. Estos nuevos revestimientos son visualmente similares al original, pero no son tan intensamente amarillos e iridiscentes como los antiguos revestimientos de cromo VI. La protección contra la corrosión de estos nuevos revestimientos tampoco alcanza el nivel de los revestimientos anteriores, pero ya es de alto nivel.
Sin embargo, no es fácil reproducir el zincado amarillo de alta calidad en la bodega del aficionado. Los cromatos amarillos de alta calidad, en particular, son difíciles de conseguir. También estamos trabajando intensamente en una solución para desarrollar un revestimiento de cromato amarillo de alta calidad, pero aún no hemos conseguido un resultado satisfactorio.
¿Qué alternativas existen?
Debido a las restricciones sobre el cromo VI, la industria del automóvil se centra cada vez más en los recubrimientos de zinc-níquel. Éstos ofrecen una excelente protección contra la corrosión gracias a su combinación de zinc y níquel, y se utilizan sobre todo en zonas con alto riesgo de corrosión.
Si desea más información sobre el zinc-níquel, puede leerla aquí: Zinc-níquel